viernes, enero 04, 2008

De la infatuación más pendeja del 2007.

Era la ocasión perfecta para pasármela de maravilla. Srita P. cumplía años y decidió celebrarlo en aquél bar al que somos asiduas desde hace tiempo. El buen trato y el compañerismo estaba al menos garantizado; la comitiva también tenía todo el ánimo de echar todo el desmadre posible para llenar el anectodario, o en su defecto, para sacar buenas carcajadas durante el cuchicheo telefónico del día siguiente.

Yo iba acompañada por Lady Red, una amiga suya y Forrest. Pasamos al obligado y siempre agradable precopeo en la Condesa, la siguiente parada sería el bar... me encanta andar de marcha!

Llegamos a nuestro destino. Un brindis tras otro por la festejada, charla, baile, carcajadas, chistes. Un momento después, la mirada se cruzó con esos ojos brujos, verdes. Algo me dijeron, no se bien qué, pero hacía ya tanto tiempo que unos ojos no me causaban tal impacto. Quedé sorprendida.

Con gusto descubrí que se sentó en la mesa de enfrente, justamente ubicado hasta donde yo estaba. Podía sentir continuamente su mirada. brindaba y reía con sus amigos, y discretamente, en nanosegundos, me dirigía una sonrisa acompañada de esos ojos brujos.

Habrán ustedes de saber que para ciertas cosas soy en realidad muuuuy tímida. En este orden de ideas, intentaba aplicar la tipiquísima estrategia de sostenerle la mirada por algunos segundos y sonreirle; pero verdaderamente no podía. Sentía que las revolucionadas pulsaciones que tenía se notaban por encima de mi blusa... me encontraba absolutamente vulnerable. Máxime que ya era algo evidente que el niño me seguía echando ojitos y flirteando con esta servidora. Sin embargo, no se acercaba.

Pasaron así como 2 horas... yo seguía echando desmadre en obvio de que mis habilidades para el ligue son verdaderamete limitadas. Me dirigí hacia la entrada del lugar para poder contestar mi teléfono, otro invitado solicitaba referencias claras para llegar al lugar. Cuando colgué y me dirigía de nuevo a mi mesa, me interceptó justo en la entrada.

- Esperas a alguien??- Me dijo clavando los ojos brujos sobre los míos.
Profana: Titubee para contestar (es increíble cómo las habilidades intelectuales se ausentan de uno cuando alguien que te ha causado tal impacto se dirige a ti, hasta para la respuesta más pendeja)- No, un amigo que no sabe cómo llegar.
- Y tu novio? (o sea, así o más típico?, pero aún así, me derritió).
Profana: No tengo- (pero como que tu encajas perfectamente en el perfil de la vacante) contesté con indiferencia.
- No te creo. Una niña tan bonita como tu no puede no tener novio.- Dijo con esa pose mezcla entre Sinatra y Gardel, pero mejorados.
Profana: Pues no tengo, ya ves.- ( nomameswey, creo que si le lato)- Disculpa, pero voy de regreso con mis amigos (No me chingues, pendeja, de verdad acabas de contestar eso??? era tu oportunidad!)
- Veo que estás en la mesa de enfrente a la mía, ahora me acerco a brindar contigo va??-
Profana: (awebowey... back on track!) ok.

Ya después me alcanzó en la mesa, platicamos un poco, bailamos y yo me sentía la mejor vieja del mundo. Los amigos con los que llegué se fueron, prefería regresar en taxi a mi casa antes de perder la oportunidad de estar aunque fuese otro ratito con él. Sus amigos se fueron después, querían seguir la fiesta en otro lado. Se acercaron a notificarle el plan y me invitaron a seguirla con ellos. Decliné la invitación porque Srta. P, la festejada, seguía en el antro. El declinó la invitación también, no obstante ninguno de sus amigos se quedase en el lugar.

Más avanzada la noche (que más bien para estas horas ya era muy de madrugada), el intercambio de teléfonos y de datos personales fue llevado a cabo. Mis amigos pensaron que ya era hora de irse cuando empezaron a poner "las calmadas" y las luces empezaron a encenderse gradualmente. Jamás me di cuenta de esos sucesos, seguía embelesada en los ojos brujos, y no se ni recuerdo cuánto tiempo me perdí en ellos.

- Me encantaría verte de nuevo- Me dijo ladeando la cabeza poniendo esos ojos de gato de Shrek.
Profana: Bueno, tienes mi número y a mi también me gustaría. Márcame y nos ponemos de acuerdo, ok?. Me temblaron las piernas... casi juro que tartamudeé.
- Créeme que lo haré- contestó esbozando una sonrisa, de ésas que el hacía y se me iluminaba el mundo.

Se acercó, me besó la mejilla y partí del lugar.

Como la historia es medio larga, la dividiré en varios posts... por lo que esta historia continuará....

Actualización.- No mamen, no se que chingados hice, pero creo que ya no aparece el link para que pongan comentarios, así que si alguien pudiera ayudarme mucho agradecería que me dijeran cómo restaurar el errorcito. Pueden dejar sus instrucciones en el post anterior, o bien, mandarlos a profana@live.com.mx, donde serán atendidas las bien recibidas instrucciones.

Por su Atención Gracias, Atte. Sorbitos y soliloquios al servicio de la comunidad.

6 comentarios:

Miss Pinky dijo...

bueno pues q me quejo de las continuaciones verdad? jejeje por lo menos la mia ya la puse ahora esperare la tuya.

La princesa muy rota dijo...

Profana!!!!!!!! que a toda madre que te pasó eso!!! es de lo mas genial!!!
felicidades amiwi :)

Jana dijo...

No manchessss es lo mejor que te puede pasar en el antrito,,, ya quiero saber que mas paso!!

Ahi te mando por mail lo de como cambiarle sale?

Profana dijo...

Miss Pinky: jejejeje, si verdad??' de lo que me quejo... y ahí voy yo también! Gracias por la espera.

Lady Princess: No, eso fue lo bonito, sigue leyendo y ve dónde terminó todo esto, si por algo puse ese título...

Jane: si, como le dije a Lady... eso fue lo bonito... ya verás, ya verás...

Lear: Gracias por el comentario, la segunda entrega llega en cualquier momento...

Anónimo dijo...

Profana!!!, es un gusto y un honor leerte...
Espero la segunda emisión, pero al parecer todo va bien (muuuy bien) con este galán de antro...

Abrazos y besos.

Profana dijo...

Doña Prika: Se equivoca usted, gusto y honor es que Usted me lea.

Pos ni tan bien me fue... siga leyendo y se enterará por qué!